El uso de carretillas elevadoras se rige por una serie de reglas fundamentales que, aunque no son obligatorias, son una buena guía para que las empresas las sigan en lo que respecta a la calidad y la seguridad en su trabajo. Como resultado, garantizan un manejo óptimo y excelente, además de conducir bien y con seguridad la carretilla elevadora.
Necesidad de formación
Hay muchos equipos, puestos y deberes en una empresa. Para operar un carretilla elevadora de manera efectiva, su operario, la persona a cargo de conducirlo y supervisarlo, debe poseer la capacidad de adaptarse a las tecnologías emergentes y las situaciones potencialmente peligrosas. Se recomienda a todos los usuarios de carretillas elevadoras que reciban la instrucción y la formación necesarias.
Antes de comenzar a usar una carretilla elevadora, debemos tener un programa de capacitación adaptado al nivel de experiencia de los trabajadores. Son necesarios para poder operar un vehículo de manera segura y efectiva. En consecuencia, debe distinguirse entre los que se incorporan a la empresa sin experiencia, los que tienen formación pero no la experiencia y los que reutilizan y adaptan sus conocimientos fruto de la experiencia y la formación. El último perfil es el idóneo.
Objetivos de la norma que apuesta por la formación
El objetivo de la norma Une 58451:2014 es delinear los componentes clave de la instrucción de los operarios de carretillas elevadoras hasta 10.000 kg. Al hacerlo, se compromete a garantizar que el operario pueda utilizar las carretillas elevadoras en un entorno de trabajo y que conozca los riesgos y los procedimientos de manipulación actuales.
¿Quién puede impartir la formación?
Las empresas que se especializan en la formación, como las autoescuelas o los fabricantes y proveedores de carretillas elevadoras, son las únicas que pueden ofrecer formación. Estos ofrecen numerosas y adecuadas instalaciones para la formación teórica y práctica. Además de carretillas elevadoras y otros equipos, puede acreditar y contar con personal para capacitaciones, certificar capacitadores que cumplan con los requisitos y contar con procedimientos que aseguren la calidad de los certificados para actividades de capacitación.
Perfil de los formadores
Los instructores deben ser mayores de 25 años y tener al menos un nivel profesional de formación técnica o tres años de experiencia en actividades relacionadas con el mantenimiento. Un organismo de certificación también podrá acreditarles por tener una formación de nivel básico en prevención de riesgos laborales —de al menos 50 horas— así como por tener conocimientos pedagógicos y habilidades comunicativas. Cuando se trata del supervisor, debe ser elegido por la empresa o tener la capacitación necesaria. Además, a los que tienen experiencia se les dan 7 u 8 horas, mientras que a los que no tienen experiencia se les dan 20.
Certificado de la formación
Después de completar la capacitación necesaria, la certificación se obtiene después de aprobar todas las pruebas teóricas y prácticas necesarias para operar y manejar una carretilla elevadora eléctrica. Las empresas formadas constan en un certificado pero igualmente las empresas que han realizado la formación tienen un registro de los operarios que han llevado a cabo el curso.
Ley de prevención de Riesgos Laborales
Nuestro país existe una normativa de conducción de carretillas elevadoras que se rige por el Real Decreto 31/95. El empresario está obligado a velar por que cada trabajador reciba una formación teórica y práctica adecuada y suficiente de acuerdo con los artículos 18 y 19 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. La capacitación también debe adaptarse al puesto o función del trabajador dentro de la organización y ser lo suficientemente flexible para adaptarse tanto a los riesgos existentes como a los emergentes. Las formaciones deben repetirse ocasionalmente, si es necesario.
Además de evitar situaciones que puedan empeorar, si conocemos estas normas, podemos garantizar la seguridad del operario y de los demás empleados de la empresa. Dado que la Inspección de Trabajo de la Seguridad Social lo exigiría en caso de accidente del trabajador o por cualquier motivo que estime oportuno, la formación es absolutamente imprescindible.
No obstante, debemos estar constantemente atentos a posibles actualizaciones, renovaciones o ampliaciones de la legislación sobre carretillas elevadoras, así como de la instrucción que se ofrece.